Informe Antinarcóticos: Estados Unidos
Informe Antinarcóticos: Estados Unidos
2019
Resumen:
El gasto en cannabis, cocaína, heroína y metanfetamina fluctuó entre $120 mil millones y $145 mil millones cada año entre 2006 y 2016, rivalizando con lo que los estadounidenses gastan cada año en alcohol, según un nuevo estudio de la Corporación RAND.
Historia Completa:
El gasto en cannabis, cocaína, heroína y metanfetamina de los estadounidenses alcanzó casi $ 150 mil millones en 2016, con una gran proporción del gasto proveniente de la pequeña proporción de personas que consumen drogas a diario o casi a diario.
Los investigadores estiman que de 2006 a 2016, la cantidad total de dinero gastada por los estadounidenses en estos cuatro medicamentos fluctuó entre $120 mil millones y $145 mil millones cada año. Por el contrario, un análisis diferente encuentra que el gasto en alcohol en los EE. UU. Se estimó en $ 158 mil millones en 2017.
El gasto total en cannabis, tanto de fuentes ilegales como con licencia estatal, aumentó en aproximadamente un 50 por ciento de 2006 a 2016, de $34 mil millones a $52 mil millones. El mercado de cannabis es aproximadamente del tamaño de los mercados de cocaína y metanfetamina combinados, y el tamaño del mercado minorista de heroína ahora está más cerca del tamaño del mercado de la marihuana que de las otras drogas, según el análisis.
"Para comprender mejor los cambios en los resultados del uso de drogas y los efectos de las políticas, los legisladores deben saber qué está sucediendo en los mercados de estas sustancias", dijo Greg Midgette, autor principal del estudio, profesor asistente en la Universidad de Maryland y miembro de RAND, una organización de investigación sin fines de lucro. "Pero es un desafío generar estas estimaciones, y dado que se han eliminado las fuentes de datos críticas, probablemente será más difícil generar estas cifras en el futuro".
El informe muestra que después de caer precipitadamente de 2006 a 2010, el consumo de cocaína siguió cayendo lentamente durante 2015 y luego aumentó en 2016. Los resultados sugieren que 2,4 millones de personas consumieron cocaína cuatro o días más en el último mes en 2015 y 2016. Los resultados también sugieren que el consumo creció en 2016 entre un número estable de usuarios a medida que disminuyó el precio por gramo puro.
El consumo de heroína aumentó aproximadamente un 10 por ciento anual entre 2010 y 2016, según el análisis. Mientras que la mayor parte de la heroína que se consume en los Estados Unidos proviene de las amapolas cultivadas en México, la introducción de opioides sintéticos como el fentanilo en los mercados de heroína ha aumentado el riesgo de consumir heroína y ha complicado los análisis de mercado.
Hubo un aumento constante en la cantidad de heroína incautada dentro de los Estados Unidos y en la frontera suroeste desde 2007 hasta 2016. Los cambios en la composición de los consumidores de heroína, que potencialmente implican un mayor uso entre personas sin antecedentes penales, han aumentado la incertidumbre subyacente a estas estimaciones. .
De 2010 a 2016, la cantidad de personas que consumieron cannabis en el último mes aumentó casi un 30 por ciento, de 25 millones a 32 millones. Los cambios en la potencia de la marihuana y la proliferación de productos que no son de flores, como aceites y ceras, han hecho que las estimaciones de consumo basadas en el peso sean obsoletas y forzado un cambio en la forma en que los investigadores calculan los gastos.
Los investigadores dicen que sus estimaciones sobre el uso de metanfetamina están sujetas a la mayor incertidumbre porque los conjuntos de datos nacionales hacen un trabajo particularmente pobre al capturar su uso.
El gobierno federal de los Estados Unidos suspendió un esfuerzo crítico de recopilación de datos en 2003, el Monitoreo de Abuso de Drogas de Detenidos, o ADAM, justo antes de que se creyera que el uso de metanfetamina estaba en su primer pico durante 2004 a 2006.
ADAM no solo recopiló información detallada sobre las transacciones del mercado de drogas de los detenidos, sino que también incluyó un análisis de orina voluntario que solo podía usarse con fines de investigación. Una versión limitada de ADAM se recuperó en 2007 y luego se eliminó después de 2013, justo cuando se creía que el consumo de metanfetamina estaba repuntando.
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